La vuelta de Ángel Di María al fútbol argentino ha generado un auténtico revuelo. 🎉 A sus 37 años, el delantero ha demostrado que aún tiene mucho para dar en la cancha y su rendimiento con la camiseta de Rosario Central no ha pasado desapercibido. Junto a su compañero Leandro Paredes, ambos se han convertido en los futbolistas más destacados del ámbito local, mostrando un nivel que rememora los grandes días del fútbol argentino.
El vínculo entre Di María y Paredes va más allá de lo deportivo. Fideo, como es conocido, ha llegado a considerar al capitán de Boca Juniors como su “hermano menor”. Esto no solo habla de una gran amistad, sino también de una motivación común para el futuro. En recientes declaraciones, Di María expresó su deseo de formar un cuerpo técnico con Paredes como su ayudante. “Es verdad. Vamos a intentarlo en su momento. Soy más grande que él, todavía tiene tiempo”, comentó en una charla con el periodista Diego Monroig por ESPN.
Di María y sus planes como entrenador
Una de las ideas que más entusiasma a Di María es la de seguir ligado al fútbol como entrenador una vez que cuelgue las botas. La posibilidad de contar con Leandro Paredes en su cuerpo técnico es algo que ya han discutido. “Ya está hablado, no hay ningún lío. Una vez en cada lado vamos a estar”, afirmó Di María, dejando entrever que su futuro en el mundo del fútbol podría ser tan emocionante como su presente.
El deseo de ambos por entrenar juntos es un reflejo del respeto y la admiración que se tienen. En esta relación, la pasión por el deporte se convierte en un vínculo fortalecido por años de complicidad. “Pero la idea es una vez en Central, una vez en Boca, seguro, eso seguro…”, sostuvo el delantero, dejando en claro que estos planes son una de sus mayores prioridades.
La visita inesperada de Paredes
En medio de esta emocionante etapa, Leandro Paredes sorprendió a Di María con una visita inesperada en Rosario. Luego del partido de Boca ante Defensa y Justicia, el plantel tuvo unos días libres y el capitán Xeneize aprovechó para pasar tiempo con su amigo. “Visita sorpresa a mis tíos”, publicó Camila Galante junto a una foto donde Di María es visto disfrutando del día con su familia y el pequeño hijo de Paredes.
Este tipo de gestos subraya la cercanía de ambos futbolistas, más allá de la rivalidad que podría existir entre sus clubes. Al fin y al cabo, el vínculo entre los dos no se limita al ámbito deportivo; es una amistad que ha crecido con el tiempo y ahora se traduce en apoyo mutuo en sus vidas personales.
A medida que avanza la temporada y con Di María brillando cada vez más en Rosario, no se puede evitar imaginar un futuro donde estos dos jugadores se conviertan en los entrenadores que el fútbol argentino ha estado esperando. La conexión entre ellos podría transformar no solo sus respectivas carreras, sino también influir en la próxima generación de futbolistas que miran hacia estos dos ídolos.
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