La posibilidad de que Benjamín Rollheiser, un jugador con pasado en River Plate, se sume a las filas de Boca Juniors ha generado un gran revuelo en el ámbito del fútbol argentino.
El joven delantero, actualmente en el Benfica de Portugal, ha despertado el interés del club xeneize, que estaría dispuesto a invertir parte de los fondos obtenidos por la venta de Cristian Medina para concretar esta operación.
Rollheiser, quien se formó en las divisiones inferiores de River y debutó en 2019, no logró consolidarse como titular indiscutido en el equipo de Marcelo Gallardo, pero dejó entrever su potencial en varias ocasiones. Su velocidad, habilidad en el uno contra uno y versatilidad para desempeñarse en diferentes posiciones ofensivas lo convierten en un jugador atractivo para cualquier equipo.
Tras su paso por River, encontró mayor continuidad en Estudiantes de La Plata, donde sus destacadas actuaciones llamaron la atención del Benfica, que lo fichó para competir en una liga de mayor exigencia.
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La intención de Boca de repatriar a Rollheiser representa una jugada arriesgada, pero que podría resultar en un gran acierto. Su pasado en el club rival añade un elemento de controversia, ya que la afición xeneize tiene opiniones divididas sobre la posibilidad de incorporar a un ex jugador de River.
Sin embargo, el talento y la proyección del delantero son innegables, y su llegada podría ser clave para reforzar un ataque que busca mayor profundidad y alternativas tácticas.
El principal obstáculo para que Rollheiser vista la camiseta de Boca es su valor de mercado, que se estima en 10 millones de euros según Transfermarkt. Aunque Boca Juniors es uno de los clubes con mayor poder económico en Argentina, la cifra es considerable y requerirá un esfuerzo financiero significativo. Se especula que el club podría explorar opciones como un préstamo con opción de compra para hacer viable la operación.
Otro factor determinante en esta negociación es el deseo del propio jugador. Actualmente, Rollheiser se encuentra buscando consolidarse en el fútbol europeo, lo que podría complicar su regreso al fútbol argentino.
Sin embargo, la posibilidad de jugar en un club de la magnitud de Boca Juniors, con toda la presión y exigencia que eso conlleva, podría resultar un desafío atractivo para él.
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